Los datos revelan que Yucatán continúa siendo el estado más pacífico de México.
El Instituto para la Economía y la Paz (IEP) presentó su undécimo Índice de Paz de México (IPM), revelando un panorama mixto en cuanto a la seguridad y la tranquilidad en el país. A pesar de registrar un modesto aumento del 1.4 por ciento en la paz en 2023, persisten desafíos significativos, especialmente relacionados con el crimen organizado y los homicidios.
Según el informe, México ha experimentado una mejora gradual en la paz durante los últimos cuatro años, aunque aún enfrenta una disminución del 14.4 por ciento desde 2015. Este declive se ve reflejado en tasas preocupantes de crimen organizado y homicidios, que siguen siendo notablemente altas en comparación con años anteriores.
Aunque la tasa de homicidios disminuyó un 5.3 por ciento en 2023, marcando el cuarto año consecutivo de mejora, la cifra de más de 30 mil 500 víctimas sigue siendo alarmante. Con 23 homicidios por cada 100 mil habitantes, México se encuentra entre los países con las tasas más altas de homicidios en el mundo, ocupando el decimocuarto lugar.
Los datos revelan que Yucatán continúa siendo el estado más pacífico de México, mientras que Colima se mantiene como el menos pacífico, con una tasa récord de 111 homicidios por cada 100 mil personas en 2023. Este último dato subraya la persistente problemática en ciertas regiones del país, donde la violencia vinculada al crimen organizado sigue siendo desenfrenada.
Uno de los principales cambios en el panorama criminal de México es la evolución de las actividades del crimen organizado, que ahora se centran en la extorsión, el narcotráfico y el tráfico de opioides sintéticos, como el fentanilo.
Este cambio se atribuye a la disminución de los mercados de marihuana y heroína ilícitas en los Estados Unidos, lo que ha llevado a un aumento del 900 por ciento en las incautaciones de fentanilo en la frontera entre México y Estados Unidos entre 2019 y 2023.
Además, la violencia contra las fuerzas del orden también es una preocupación importante. Desde 2018, más de 2 mil 600 policías han sido asesinados en México, con una tasa de mortalidad casi cuatro veces mayor que la de la población civil. Este hecho refleja los extremos niveles de violencia a los que se enfrenta la policía mexicana en su lucha contra el crimen organizado.
La violencia política también ha aumentado en los últimos años, con más de 170 asesinatos de políticos, funcionarios del gobierno y sus familiares en 2023. Esta tendencia refleja la creciente polarización política en el país y la violencia dirigida principalmente a candidatos y líderes políticos a nivel municipal.
A pesar de estos desafíos persistentes, el informe destaca la necesidad de un enfoque integral para abordar la compleja dinámica del crimen organizado, la violencia y la resiliencia socioeconómica en México. Carlos Juárez, Director del Instituto para la Economía y la Paz en México, enfatizó la importancia de aumentar la inversión en el sistema judicial, erradicar la corrupción, mejorar la gobernanza y promover la paz sostenible.
Aunque el país ha experimentado una caída del 3.7 por ciento en la resiliencia socioeconómica en la última década, el Índice de Paz Positiva (IPP) sugiere que México posee la infraestructura social necesaria para avanzar hacia una forma de paz más sostenible. Sin embargo, se requiere un compromiso continuo y acciones concertadas para abordar los desafíos persistentes y construir un futuro más seguro y pacífico para todos los mexicanos.